Temen que se desmoronen sus terrenos por las olas de las lanchas colectivas

Clarín Zonal. Los vecinos dicen que el desgaste es producido por las embarcaciones que, como consecuencia del aumento del turismo, incrementaron su frecuencia. El Municipio adelantó que le trasladará la inquietud a Prefectura.

A la preocupación por la acumulación de tierra en los ríos del Delta, los vecinos sumaron otra: como la afluencia de las lanchas turísticas se incrementa y el oleaje que se generan es muy intenso, temen por el desmoronamiento de sus terrenos.

“Estamos realmente alarmados por esta situación y nos da miedo los daños que podemos sufrir en nuestras casas. El turismo creció muchísimo y la frecuencia de las lanchas se incrementa cada vez más. Las reparaciones son muy costosas y si se llega a derrumbar un muelle, por ejemplo, nos saldría carísimo reponerlo”, manifestó Jeremías Wolff, vecino de la Primera Sección de islas.

Las casas linderas al Río Angostura son las más afectadas por esta problemática, ya que es la zona más transitada por las lanchas turísticas del Delta. “Si bien nuestras lanchas recorren un solo tramo del Río Angostura, en su intersección con el Río Espera Grande, puede ser que quizás la velocidad en el recorrido de los vehículos fluviales genere olas que golpean las casas de las zonas. Igualmente, nosotros no determinamos el recorrido a realizar, sino que es un convenio establecido con Provincia y cada empresa de transporte tiene sus ríos a transitar”, precisó Nely Romaro, presidente de Interisleña.

Fernando Buyet, titular de la firma El Jilguero manifestó: “Si bien nuestras lanchas transitan esa zona, hay sólo dos servicios por día: uno a las 11 y otro a las 17. No es mucha la frecuencia con la que nos movemos. Sin embargo, entendemos que, al ser un mismo río por el que circulan las lanchas turísticas, las casas linderas sufran las consecuencias”.

“Se trata de una zona turística y las lanchas van a continuar circulando, pero si no se concentraran todas en el mismo circuito y la velocidad fuera menor, no tendríamos tantos problemas con el desprendimiento de tierra”, expresó Eduardo Sanguinetti, isleño de la Primera Sección.

Desde la Comuna, Julio Zamora, presidente del Concejo Deliberante de Tigre, remarcó: “Vamos a trasladarle a Prefectura esta inquietud de los vecinos para que realicen un control sobre la velocidad de las lanchas”.

 

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