En la web, los vecinos podrán vigilar a las empresas de riesgo ambiental
Además las compañías deberán establecer un plan de comunicación para informar a la comunidad sobre el nivel de riesgo y las recomendaciones para actuar en cada incidente. Así lo determina la resolución 3.722 de 2016 del OPDS y que obliga a los establecimientos industriales de tercera categoría -máxima complejidad ambiental- a comunicar a los vecinos y a la Provincia a través del sitio www.opds.gba.gov.ar, sobre toda situación de cambio programado o no, que pudiera despertar cambios bruscos en las operaciones.
Como en las aplicaciones de mapas de Google, los usuarios conocerán los motivos de ruidos, humo, olores o vuelcos, que muchas veces no son peligrosos pero generan alarma.
«Si ocurriera una situación no prevista, a través de este mapa, podremos intervenir con mayor eficacia y los habitantes que viven cerca conocerán el nivel de riesgo, y forma de actuar en cada caso», explicó el responsable del OPDS, Ricardo Pagola a Clarín.
Hace tres semanas, en la refinería de YPF de Ensenada, hubo un corte de energía que obligó a la empresa a volver a encender el compresor. Esto ocasionó ruidos extraños y una llama más alta de lo habitual en la antorcha que quema los gases. De inmediato, en las redes sociales comenzaron las preguntas y la preocupación. Con este nuevo mecanismo de supervisión, incidentes como ese deberían quedar registrados en el sitio, para consulta de los eventuales damnificados.
Las empresas que no detallen la descripción de la situación producida en el Mapa de Alerta, serán sancionadas. Al primer incumplimiento habrá un apercibimiento y luego podrán aplicarse multas que van de los 10 mil pesos a los 200 mil.
De acuerdo con los relevamientos oficiales, el 80% de las industrias de tercera categoría están ubicadas en los polos petroquímicos de Dock Sud, Bahía Blanca y gran La Plata. También en San Martín, Tres de Febrero, La Matanza, Campana, San Nicolás y Pilar.
En la aplicación digital, los “eventos” quedan marcados con una “gota” roja o amarilla. Las primeras representan situaciones no previstas. Las anaranjadas informan sobre episodios programados por las compañías. La disposición oficial también fija pautas para resolver esas situaciones. Después de finalizado, las firmas deben presentar a la Autoridad Ambiental –en un plazo de 72 horas- un informe que contenga la descripción del incidente, las posibles causas, las acciones de mitigación aplicadas, un cronograma de adecuaciones de las tareas realizadas para subsanar la situación, las acciones de prevención a adoptar para evitar acontecimientos similares y un detalle y acreditación de la estrategia de comunicación empleada.