El pozo que se tragó a una mujer en Villa Adelina avivó el alerta entre vecinos
Entre la sorpresa, la desesperación y la inquietud, los vecinos del pasaje Garibotti al 2200, en el límite entre Villa Adelina y Boulogne, se enteraban del «accidente» que había sufrido Claudia Peralta, una mujer de 52 años que vive en el barrio hace décadas, y que el domingo por la tarde cayó en un pozo con más diez de metros de profundidad que se formó repentinamente en el patio de su casa.
Una mujer cayó en un pozo de más diez metros profundidad y cinco diámetro que se abrió repentinamente el patio su casa tras desarmar una de pileta lona. Sucedió en Pasaje Garibotti al 2200, Villa Adelina.Foto: Maxi Failla
Si bien la noticia tomó a todos desprevenidos, el asombro no fue completo, ya que no es la primera vez que el Barrio Obrero, como se conoce a la zona, asiste a un hundimiento como el del pasado fin de semana. En efecto, es al menos la tercera vez que el piso se hunde a los pies de un vecino, en el interior mismo de sus viviendas.
Limpiaba la pileta, cedió el piso y cayó en un pozo gigante
«A la familia Leiva se les desmoronó todo abajo de su casa y perdieron casi todo, la heladera, televisores, de todo. Era un pozo mucho peor. Al poco tiempo, a otra familia que está pegada al tinglado que tenemos, también se derrumbó otra casa, la chupó el agua», relataba Javier, hijo de la víctima, cuando le consultaron sobre los antecedentes en la zona.
Otro vecino de las calles transversales, Piedrabuena y Guayaquil, contaba en los medios televisivos que: «Es la tercera casa que se hunde en la misma manzana. En 1991 se hizo un pozo enorme en una casa y unos años después desapareció otra por completo”.
Ante lo reiterado de la cuestión, el Municipio de San Isidro recomendó a los frentistas que controlen la existencia de zonas blandas, con pozos viejos mal rellenados o napas freáticas altas en los patios traseros y jardines de sus casas.
En el patio de los Peralta trabajó personal de Defensa Civil, bomberos y una cuadrilla municipal, para retirar el agua del pozo y luego rellenarlo.Foto: Maxi Failla
En el caso de constatar alguna irregularidad en el terreno, aconsejan consultar a un profesional para evitar nuevos accidentes. No obstante, las autoridades enviarán a la empresa Aysa un pedido de inspección en la zona para detectar casos similares.
El barrio cuenta con servicio de cloacas, aunque en muchas propiedades, como la de los Peralta que data de más de 60 años, bajo tierra se conservan los restos de antiguos aljibes y pozos ciegos.
Investigan el origen del pozo que se tragó a una mujer que limpiaba la pileta
Claudia sufrió heridas por la caída, y un fuerte golpe en la cabeza producido por parte del material que se desprendió, por lo que debió recibir algunos puntos de sutura y permanecer internada en observación en la Clínica San Martín.
En el patio de su casa, una cuadrilla municipal trabaja retirando los restos de agua dentro del cráter, del que se extrajeron más de 70 mil litros, para luego proceder a su rellenado.
