Derrumbes en obras: se reaviva el debate por las inspecciones

Desde 2008 se han producido 40 accidentes de este tipo en el distrito; dejaron ocho muertos.

Un nuevo derrumbe de una obra en construcción desnudó ayer un problema recurrente en la ciudad de Buenos Aires. Se trata del segundo accidente en menos de 15 días y el número 40 desde 2008. Las cifras de la Uocra dan cuenta de que, en ese período, se registraron ocho muertos y 51 trabajadores resultaron heridos.

Las obras deben ser controladas por dos organismos de la Ciudad: la Subsecretaría de Trabajo, que debe velar por la seguridad de los trabajadores, y la Dirección General de Fiscalización y Control de Obra de la Agencia Gubernamental de Control (AGC). Ninguno de los dos entes oficiales lleva la cuenta de cuántos accidentes se han producido en los últimos años.

Ahora, un cambio en la conformación del sistema de verificaciones técnicas de la AGC genera polémica y en la oposición advierten sobre el riesgo de que este tipo de accidentes se incrementen.

«Existe una deficiencia clara en términos de inspección por parte del gobierno, fundamentalmente en la temporalidad entre la denuncia que hace la Uocra sobre una obra con incumplimientos y el tiempo que transcurre entre esa denuncia y la efectivización del control», denunció Ricardo Caamaño, vocero de la Uocra.

«El caso del derrumbe de la calle Juan Azurduy es claro: la denuncia fue presentada el 16 de mayo con carácter de urgente y no tenemos constatación de que se haya inspeccionado. Algo falló y ocurrió el accidente, que afortunadamente no tuvo víctimas mortales, pero que pudo haber sido una tragedia», agregó. El derrumbe de ayer dejó cuatro heridos (ver aparte). Según las autoridades, los controles se han incrementado. Hoy, pese al parate en la construcción, hay en el distrito unas 5000 obras en ejecución, que son controladas por un cuerpo de 80 inspectores.

«Hacemos unas 200 inspecciones diarias. Lo que se ha hecho es establecer prioridades según la etapa en la que está la obra y el grado de peligrosidad que tiene. Los accidentes de obras tienen diferentes causas posibles. Cada accidente hay que mirarlo en particular, no necesariamente es repetible en otro. Sabemos que hay momentos más críticos que otros. La demolición y la excavación son dos de ellos. Y cada obra que contiene estos elementos es seguida por los inspectores», explicó Osvaldo Alonso, director de Fiscalización y Control de Obra de la AGC.

Alonso destacó la incorporación de herramientas tecnológicas, como tablets que llevan los inspectores a las obras que incluyen hasta las denuncias que los vecinos realizan al 147. Sin embargo, no está incorporada allí la información de las denuncias realizadas en la Subsecretaría de Trabajo.

Peritos

La cartera de Fiscalización también tiene a su cargo el envío de peritos verificadores para constatar que los planos de obra se respeten. Por decreto, el gobierno reemplazó a unos 1000 profesionales ingenieros y arquitectos que, por sorteo, iban a las obras. En su lugar se incorporará a 20 inspectores que tendrán poder de policía.

«Los verificadores lo que verifican es si se cumple volumétricamente con lo que tienen establecido. Los inspectores que son empleados están provistos de la herramientas que se les dan y siguiendo un procedimiento que nos permite tener total transparencia», indicó Alonso.

Para Lilian Rodríguez, presidenta de la Asociación de Peritos Verificadores, la medida debilita «sustancialmente» los controles. «Es una disposición aberrante. No tiene un solo fundamento. No puede ser que 20 tablets hayan decapitado a un cuerpo de verificadores que viene funcionando desde hace 14 años de manera intachable. Es el profesional verificador el que informa sobre anomalías, inconsistencias e irregularidades. Es un acto criminal», aseguró.

Caamaño coincide con ella: «Si el gobierno toma la decisión de reducir su dotación de inspectores, a menos inspectores menos inspección. No parece ser la solución más apropiada».

Alejandro Bodart, diputado del MST, dijo: «El negocio inmobiliario es el gran negocio en la ciudad. Hay cerca de 5000 obras en simultáneo y se han ido deteriorando los controles. Los empresarios piden que se los controle menos porque eso cuesta. Y el Estado, en vez de controlarlos, los apaña. Venimos denunciando que no se han desmantelado las redes de corrupción de esta red Cromagnon. El año pasado querían disolver el cuerpo de inspectores de trabajo, logramos frenar la ley. Quieren eliminar los peritos verificadores».

Un problema recurrente

80 Inspectores

Fiscalización de obras

Hacen unas 200 inspecciones por día. En la ciudad de Buenos Aires hay en ejecución unas 5000 obras; otras 1000 tienen algún tipo de suspensión o clausura

40 derrumbes

Desde 2008

Es el registro de accidentes que lleva la Uocra. En ese lapso se registraron 51 heridos y 8 muertos Las obras deben ser inspeccionadas por la Subsecretaría de Trabajo y por la Dirección de Fiscalización de Obras.

No hay entrecruzamiento de datos

El gobierno porteño reemplazará el cuerpo de 1000 verificadores, que deben constatar que se cumpla con los planos, por 20 inspectores con poder de policía. Los profesionales y la oposición rechazan la medida..


Fuente: Laura Rocha La Nación

Artículos relacionados

Botón volver arriba