Prohíben al Mercado de Hacienda descargar líquidos contaminados en un afluente del Riachuelo

El Mercado de Hacienda descargaba agua con sustancias contaminantes al arroyo Cildañez, uno de los afluentes del Riachuelo. Así lo informó el Ministerio de Ambiente y Espacio Público, que a través de la Agencia de Protección Ambiental (APrA) clausuró la descarga de líquidos desde el predio hacia el arroyo.

Las clausuras ocurrieron luego de que el laboratorio de la APrA detectara que la concentración de bacterias fecales en el agua que el Mercado enviaba al arroyo superaba en más de 150 veces el límite que permite la normativa. Para determinar el cierre, la agencia hizo un control en el lugar y comprobó que seguía el vuelco de agua con sustancias orgánicas.

Las inspecciones tenían antecedentes. Durante el año pasado, la agencia hizo cuatro controles en las cámaras: uno en enero, otro en mayo y dos en septiembre. En todos los casos, los niveles de coliformes fecales (bacterias) y materia orgánica multiplicaron varias veces los estándares admitidos.

En total, se determinó que cinco cámaras que recogen los efluentes de los sectores de venta, caballerizas, atracadero y dos destinadas a la toma de muestras del tratamiento de efluentes, ya no podían seguir operando.

Las cámaras fueron selladas y el Mercado fue intimado a presentar un plan de mejoras que se ajuste a la normativa vigente y que garantice el correcto tratamiento de los efluentes. Esta propuesta deberá ser aprobada por APrA para levantar la clausura.

El Mercado de Hacienda está asentado en un predio de 32 hectáreas ubicado en las avenidas Lisandro de la Torre y de los Corrales. En verdad, no está en Liniers sino en Mataderos. Tiene 32 muelles, 450 corrales de bovinos, 40 básculas automáticas, 12 playones de lavado de camiones y recibe, en promedio, 225 camiones jaula por día. A su vez, a diario se lavan 67 camiones que generan 50 m³ de excrementos, que eran dispuestos en los conductos pluviales y cloacales.

Funciona desde 1901 cuando Mataderos era “las afueras de la Ciudad”. Con el crecimiento de la población, lo fueron rodeando casas bajas, depósitos en los que se derretía cebo, frigoríficos, el club Nueva Chicago, Ciudad Oculta y 46 monoblock del barrio Manuel Dorrego.

En 2001, con el objetivo de presionar para que se fuera de Capital, la Legislatura porteña sancionó una ley que prohibió el ingreso de ganado a la Ciudad. En ese momento se mencionaba que lo llevarían a un predio en San Vicente. Pero entre disputas políticas, falta de fondos y la complicación que podía generar que la actividad se alejara de los centros de consumo, la mudanza nunca se concretó. Así, se fueron firmando distintos convenios y la aplicación de esa ley se postergó.

En julio del año pasado, el ministro de Agroindustria de la Nación, Ricardo Buryaile, y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, firmaron un convenio de desocupación y restitución con el presidente de la firma Mercado de Liniers Sociedad Anónima, Roberto Arancedo. Así, se dio inicio al proceso para mudar el mercado al terreno de La Matanza. Pero la intendente de ese municipio del oeste bonaearense, Verónica Magario, presentó un recurso de amparo y la Justicia frenó el traslado. En los últimos días, el intendente de Ezeiza, Alejandro Granados, propuso instalarlo en su municipio, en un terreno vecino al predio de la AFA. El plazo límite para la mudanza es el 31 de diciembre de este año. Pero antes, deberán resolver la contaminación que hacen sobre el Cildañez y, en consecuencia, el Riachuelo: la cuenca más contaminada de la Argentina.

Fuente: Clarin