Conflicto portuario: la empresa dice que opera «con los más altos estándares de seguridad»
El conflicto en el puerto de Rosario volvió a tensarse. Este martes, el Ministerio de Trabajo de Santa Fe dictó la conciliación obligatoria, pero a las pocas horas hubo denuncias cruzadas entre la empresa y el sindicado por desobedecer la resolución gubernamental. En este marco, cientos de camiones quedaron varados en las cercanías de la estación sin poder descargar, lo que generó gran congestión en la zona del Acceso Su y 27 de Febrero.
El gerente general de Terminal Puerto Rosario (TPR), Leonardo Feltrinelli, señaló este miércoles que la estación no se encuentra operable y apuntó contra el Sindicato Unido Portuarios de Argentina (Supa) por no acatar la conciliación obligatoria que dictó el Ministerio de Trabajo de la provincia. El representante de la empresa dijo que “la situación es insostenible” y acusó al gremio de “hacer un lamentable aprovechamiento de la fatalidad” en el caso del operario que murió durante una operación el viernes pasado.
“El puerto está abierto pero sin operar, esperando que los estibadores retomen sus puestos de trabajo. Lo que ocurrió (la muerte del empleado Juan Oscar Contreras, el viernes pasado) fue una fatalidad y ante eso no hay palabras. El puerto ha operado durante los últimos años con los más altos estándares de seguridad. Y esa operación fue diseñada con esos parámetros y en el caso particular de lo ocurrido, los propios profesionales en seguridad e higiene del Ministerio de Trabajo corroboraron la forma con cual fue diseñada la operación. Al verificarla, la rehabilitaron para reiniciar la operación a partir del lunes pasado”, afirmó Feltrinelli.
En declaraciones al programa “El primero de la mañana” de LT8, el directivo de TPR contó que tras el impasse del fin de semana, la empresa se presentó ante el Ministerio de Trabajo de la provincia debido a que el sábado, luego de haber dejado pasar un día completo en señal de duelo por la muerte de Contreras. Luego de esas 24 horas convocamos al personal para reiniciar las actividades. El puerto nunca estuvo inhabilitado. El personal se presentó, y cuando estaba por iniciar las operaciones, la comisión directiva del Supa, violando todas las normas, ingresó violentamente a la terminal y amenazó a los estibadores con que si trabajaban que se atuvieran a las consecuencias. Los trabajadores se negaron a trabajar”.
“Eso nos llevó a hacer una presentación ante el Ministerio y fuimos convocados ayer, donde finalmente se dictó la conciliación obligatoria. Es importante resaltar que la conciliación nos obliga a ambas partes a retrotraer la situación al estado en que se encontraba al día anterior del accidente. Y las partes deben abstenerse de hacer cualquier cambio y retomar las actividades. Eso no se cumplió porque la cúpula del Supa, en una actitud fuera de lugar, y haciendo un lamentable aprovechamiento de la fatalidad, intenta avanzar en cuestiones relacionadas con organización de trabajo que es un derecho que tienen toda empresa en este país”.
Feltrinelli dijo que el Supa “tiene la intención manifiesta de designar en cada turno de cada día cada uno de los estibadores que irán a cada una de las operaciones». Sostuvo: «En una operación no sólo hay cuestiones relacionadas con la seguridad personal sino de seguridad patrimonial que pueden verse afectadas con lo que azota a la ciudad o el país como el narcotráfico. Hay que tener mucha seguridad en ese sentido”.
Al ser consultado sobre como cree que seguirá el conflicto, el gerente de TPR resaltó: “Todos los canales de comunicación continúan abiertos. Vamos a seguir dialogando a través del Ministerio con la intención de volver a las operaciones lo antes posible. En el caso particular que nos ocupa, hacerlo de la forma más segura posible. Pero esta conducción sindical atenta contra la viabilidad de la empresa, afecta a las fuentes laborales y a la operatoria del puerto de todos los rosarinos. Esta situación es insostenible y perjudica a cada una de las cadenas de valor que mueven sus productos a través de la terminal que verán dañadas sus operaciones”.
Con relación a la muerte del operario Contreras, el funcionario de TPR sostuvo: «Hay una investigación en marcha que determinará si hay algún tipo de culpabilidad. Pero la forma en que fue diseñada la operación estaba acorde a los más altos estándares internacionales, incluso había sido verificada a posterior por los profesionales del Ministerio de Trabajo, quienes corroboraron la forma en que fue implementada. En este caso no hubo ningún tema relacionado con infraestructura propia, dado que el equipo que estuvo involucrado en el incidente fue la grúa del buque».